lunes, 20 de octubre de 2014

El difícil camino

Debo reconocer que al principio, cuando recién comienza el camino, el saber que Él existe, que eres libre, etc,  todo se ve más fácil, el ánimo o ganas son muy fuertes,  pero lamentablemente al andar uno se encuentra primero con uno mismo, con aquella naturaleza que tanto nos advierte el Padre en su escritura, la carne que nada bueno tiene, que es opuesta a Dios. Insertos en este mundo, nos levantamos cada mañana a luchar, algunas veces con muchas ganas y otras sin ningún entusiasmo, más bien entregado a las variables propias del un día cualquiera, ¿por qué sucede esto último? ¿acaso no son hijo de Dios? O ¿no está en mi el Espíritu?; la verdad que no!, ÉL siempre me y nos acompaña, porque ya lo recibimos, esta guiandonos,  esperando silenciosamente tú opción diaria, porque largo es el camino y pocos llegan a la meta, sino ¿para que las pruebas? el Padre quiere que lo ames, lo necesites, no te obliga a seguirlo, te invita a elegir.....